2011/07/01

Violencia de género y medios

Xornal.com

Los medios de comunicación contribuyen a visibilizar la violencia sobre las mujeres y a que esta haya dejado de ser un conflicto privado para ser considerado un problema de toda la sociedad. A lo largo de 2010, las noticias sobre violencia de género fueron las terceras en el reparto de tiempo de los informativos de las televisiones públicas, solo por detrás de la crisis económica y las medidas de ajuste. Es más, las noticias sobre violencia de género aparecen como primera o segunda noticia en los titulares de esos informativos el doble de veces que el resto de temas de actualidad.

Estos datos se desprenden de un estudio realizado por el Consejo Audiovisual de Andalucía que revela que las informaciones sobre violencia de género no solo están motivadas por sucesos trágicos, sino también por campañas institucionales de sensibilización. De hecho, los días con mayor espacio dedicado a este asunto no coinciden con los asesinatos de mujeres. Los picos de difusión se concentran en marzo y noviembre con motivo de la celebración del Día de la Mujer Trabajadora y del Día Contra la Violencia de Género, respectivamente. Mientras los expertos intentan dilucidar el alcance exacto del llamado efecto contagio, lo que está contrastado es el tremendo coste social de que esos crímenes se pierdan en el silencio. Es crucial la labor que realizan los medios de comunicación de mentalización y sensibilización de la ciudadanía, sobre una cuestión que es calificada por unanimidad como una lacra social. Por eso es tan importante dar un paso más, un paso que añada a las informaciones un plus de calidad. Es preciso que los medios pongan especial celo en cómo se tratan los asesinatos de mujeres, la profesionalidad y el respeto a las víctimas deben predominar por encima de cualquier intento de banalización o frivolidad.

Sería pues conveniente no dar pábulo a actores ocasionales que no aportan datos para comprender la noticia y sí añaden un morbo que convierte en espectáculo un drama humano real. Una noticia bien enfocada salva vidas, una noticia regada de sangre extiende el terror del que se alimentan los maltratadores.

También hay que tener presente que, en el reparto de los tiempos de voz, dos de cada tres intervenciones en este tipo de noticias son de mujeres. ¿No transmitimos con ello la idea de que estamos ante un problema solo de las mujeres y no de la sociedad en su conjunto? Hay que extender el tratamiento a los actores masculinos, de la misma forma que hay que extender el análisis a otro tipo de programas, como los magazines matinales y vespertinos donde, frecuentemente, los casos de violencia de género se tratan desde el amarillismo, enfatizando los aspectos más escabrosos sin atender a las más elementales normas de la ética periodística. Durante estos años, hemos logrado entre todos que la violencia de género fuera tenida en cuenta por los medios. Nuestra sociedad está aprendiendo a plantarle cara a los verdugos y a ponerse sin complejos al lado de las víctimas. Es el momento de dar un paso adelante. Las televisiones deben adoptar códigos de autorregulación para que, manteniendo incólume su derecho a la libertad de expresión, sigamos haciendo crecer nuestra democracia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

PUBLICA TU COMENTARIO