La compañía trae al Jovellanos «Argelino, servidor de dos amos»
Hay veces que uno va a ver un montaje motivado por el argumento de la obra o el autor que firma el texto, en otras ocasiones son los actores o el director lo que le impulsan a acudir al teatro, y está por último el caso de espectáculos en que simplemente la compañía que los pone en pie es suficiente garantía de que uno no va a perder esa tarde ni el tiempo ni el dinero. Los madrileños «Animalario» son uno de esos grupos que uno puede ir a ver casi a ciegas, sabiendo que lo que le van a ofrecer será una propuesta interesante, novedosa, bien escrita, dirigida e interpretada. La compañía se funda a finales de los años noventa a partir del encuentro del grupo «Ración de Oreja», que integraban unos casi principiantes Alberto San Juan, Guillermo Toledo, Ernesto Alterio y Natalie Poza, con el actor y director Andrés Lima y su compañía «Riesgo». De la fusión de ambos colectivos teatrales surge «Animalario», que toma su título de un texto de Alberto San Juan. El nuevo grupo se propone recuperar la idea de trabajo en equipo abandonada por muchos grupos en los años ochenta, tratando de hacer en la compañía todos un poco de todo. Así, San Juan es además de actor, autor o adaptador de varios de los textos que ponen en pie, y Andrés Lima no se limita a ser director, sino que ocasionalmente actúa también en los montajes. El compromiso es otro de los rasgos de una compañía que sin ser militante siempre ha buscado historias con algún tipo de interés social: el abuso de menores en un barrio obrero de una gran ciudad en «Hamelin», la inmigración y la explotación laboral en «Argelino» o la revisión de la historia reciente de España en su último montaje, «Urtain». La innovación desde el punto de vista escénico, la experimentación con el lenguaje teatral y el correr, por qué no, ciertos riesgos, es otra de las señas de identidad de la compañía, que además de montar textos propios ha trabajado en estrecha relación con algunos de los nuevos dramaturgos españoles más interesantes, como Juan Mayorga, autor del texto de «Últimas palabras de Copito de Nieve», comedia dramática protagonizada por el difunto gorila albino del zoo de Barcelona, y posiblemente uno de los mejores espectáculos de la compañía. El sábado 15 presentarán en el teatro Jovellanos de Gijón «Argelino, servidor de dos amos», adaptación en clave presentista de una comedia del autor veneciano Carlo Goldoni, usando la trama y los personajes escritos en 1745 para reflexionar sobre problemas tan actuales y contemporáneos como la explotación de los trabajadores inmigrantes. Para el público asturiano, que no pudo ver en los teatros asturianos el anterior y ambicioso montaje de «Animalario», «Marat-Sade», de Peter Weiss, puede ser una magnífica oportunidad para reencontrarse o descubrir a una de las mejores compañías que actualmente trabajan en nuestro país
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