Apenas existen precedentes en Asturias por detenciones relacionadas con delitos de índole racista.
Seis jóvenes gijoneses, cinco de ellos menores de edad, fueron arrestados esta semana acusados de amenazar a una mujer de origen latinoamericano a la que supuestamente llevaban persiguiendo e insultando desde el pasado mes de agosto. Llegaron incluso a realizar pintadas en la fachada del edificio en el que vive, en el barrio de Pumarín, y a causar daños en su vehículo.
La víctima denunció «el acoso al que estaba siendo sometida» en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. Lo hizo semanas después de que comenzase este presunto acoso, «cansada de sufrir la persecución y ante la evidencia de que los hechos dejaban de ser una simple gamberrada».
A mediados de agosto se sucedieron una serie de daños contra su turismo cuando estaba aparcado en la vía pública. Aproximadamente en las mismas fechas empezaron a aparecer «pintadas cuyo contenido alertaba a la comunidad de vecinos sobre su persona, acusándola de cometer delitos, desprestigiándola y generando malestar y desconfianza», explicaron fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Los jóvenes pasaron de las pintadas y los daños en su coche a las amenazas directas. La insultaban cuando se la encontraban en la calle e incluso llamaron al timbre para proferirle insultos con expresiones de contenido xenófobo y racista por su procedencia. La situación se volvió insoportable hasta tal punto que la víctima decidió poner los hechos en conocimiento de la Policía. Según fuentes próximas al caso, la mujer esperó durante un tiempo pensando que la situación se podría arreglar y que no pasaba de ser una mera chiquillada por parte de varios niños.
Sin embargo, sus actos cada vez eran más contundentes y más visibles, no sólo para la propia afectada, sino también para el resto del vecindario.
A lo largo de la última semana, el Cuerpo Nacional de Policía «ha logrado identificar y detener a los presuntos autores, residentes la mayoría de ellos en el barrio de Pumarín». Se trata de cuatro chicos y dos chicas. Los arrestados menores de edad acudieron a prestar declaración acompañados de sus padres, que a su vez fueron pertinentemente informados sobre los presuntos hechos delictivos que habían cometido sus hijos durante los últimos meses. Además, la Policía informó a la Fiscalía de Menores sobre lo ocurrido.
Episodios anteriores
La Policía investiga si el grupo de jóvenes detenidos pudiesen estar involucrados en otros episodios similares en los que hayan insultado o amedrentado a otros ciudadanos extranjeros por su mera condición de inmigrantes. Según ha podido saber este periódico, se trata de jóvenes que se reúnen con frecuencia durante las tardes en un parque público y es habitual verlos en actitud provocadora y retando a otros chicos. Será ahora el fiscal de Menores el encargado de determinar si ha habido delito y, en tal caso, imponerles las penas pertinentes.
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