La mujer no había presentado ninguna denuncia por maltrato
PABLO FERRI - Málaga -elpais.com
Extraño suceso en la localidad malagueña de Ronda. Catalina Benítez, de 52 años, murió el lunes por la noche en su casa de un golpe en la cabeza causado por la culata de una escopeta, según fuentes de la investigación. Su pareja, Francisco Álvarez, de 56, falleció tras dispararse con la misma arma. Parece un caso de violencia de género pero la juez que lo lleva, del juzgado de instrucción número 1 de Ronda, prefirió ser cauta y decretar el secreto de sumario. No se descarta ninguna hipótesis.
Los vecinos oyeron una discusión antes de que se produjese el crimen
El lunes por la noche, hacia las 21.30, algunos vecinos del número 52 de la avenida de Málaga en Ronda escucharon gritos, "una discusión". Venían del primer piso, de la puerta D. Luego un fuerte ruido. "Yo pensé que era el portón de abajo, que suena muy fuerte" recuerda Mariam, del segundo B. Algo más tarde, un familiar de la pareja, preocupado pues no le habían cogido el teléfono en todo el día, acudió a la Policía Local. Todos juntos fueron al piso y, al no poder abrir con la llave, entraron por la casa de un vecino, relató un agente a este periódico. Allí encontraron los cadáveres.
Un portavoz de la policía reconoció que "no es el caso clásico de un delito de malos tratos. No había denuncias, ni siquiera que se hubiesen retirado una vez puestas; no constaban llamadas, que normalmente las hay...". Fuentes del cuerpo apuntan que, por el momento, no hay información suficiente para validar una sola hipótesis. La juez que instruye el caso es de la misma opinión. Ayer no desveló un sólo detalle.
Varios de los vecinos de la finca donde ocurrió todo no esperaban "una cosa así". Mariam, que vive en el segundo piso, cuenta que "nunca les había escuchado discutir". Dolores, cuya casa está justo encima, no recuerda una sola discusión, "nunca les vi pelearse". Ambas coinciden en lo "atentos y amables" que eran, en su "normalidad".
La consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, dijo ayer a Europa Press que "no se conocen denuncias previas por maltrato en este caso".
Un médico forense se desplazó de Málaga a Ronda donde ayer por la mañana practicó las autopsias. Por la tarde los restos mortales tanto de uno como de otro recibieron sepultura en el cementerio municipal, previa misa y duelo en el tanatorio. El alcalde del municipio malagueño ha convocado para hoy al mediodía una concentración en repulsa de este supuesto caso de violencia machista, informa Efe.
Si se confirmase que éste es un nuevo caso de violencia de género, Catalina Benítez sería la vigesimoséptima mujer en ser asesinada por su pareja o ex pareja en lo que va de año en España. Esta misma semana un hombre asesinó a su mujer, de 48 años, en Cartagena (Murcia), tras que ésta iniciase el proceso de divorcio. El hombre, de 66 años, le disparó dos veces, una en el vientre y otra en el hombro. Luego se suicidó pegándose un tiro en el mentón.
Hasta el 16 de junio de este año, 23 mujeres habían muerto a manos de su pareja o ex pareja según datos del Instituto de la Mujer. Desde entonces la cifra baila entre 26 y 31. El año pasado 75 mujeres fueron asesinadas por sus parejas, la cifra más alta desde que el Instituto de la Mujer registra los casos. En el caso de Andalucía, Catalina Benítez sería la séptima víctima de 2009, la primera en Málaga.
Los vecinos oyeron una discusión antes de que se produjese el crimen
El lunes por la noche, hacia las 21.30, algunos vecinos del número 52 de la avenida de Málaga en Ronda escucharon gritos, "una discusión". Venían del primer piso, de la puerta D. Luego un fuerte ruido. "Yo pensé que era el portón de abajo, que suena muy fuerte" recuerda Mariam, del segundo B. Algo más tarde, un familiar de la pareja, preocupado pues no le habían cogido el teléfono en todo el día, acudió a la Policía Local. Todos juntos fueron al piso y, al no poder abrir con la llave, entraron por la casa de un vecino, relató un agente a este periódico. Allí encontraron los cadáveres.
Un portavoz de la policía reconoció que "no es el caso clásico de un delito de malos tratos. No había denuncias, ni siquiera que se hubiesen retirado una vez puestas; no constaban llamadas, que normalmente las hay...". Fuentes del cuerpo apuntan que, por el momento, no hay información suficiente para validar una sola hipótesis. La juez que instruye el caso es de la misma opinión. Ayer no desveló un sólo detalle.
Varios de los vecinos de la finca donde ocurrió todo no esperaban "una cosa así". Mariam, que vive en el segundo piso, cuenta que "nunca les había escuchado discutir". Dolores, cuya casa está justo encima, no recuerda una sola discusión, "nunca les vi pelearse". Ambas coinciden en lo "atentos y amables" que eran, en su "normalidad".
La consejera de Igualdad y Bienestar Social, Micaela Navarro, dijo ayer a Europa Press que "no se conocen denuncias previas por maltrato en este caso".
Un médico forense se desplazó de Málaga a Ronda donde ayer por la mañana practicó las autopsias. Por la tarde los restos mortales tanto de uno como de otro recibieron sepultura en el cementerio municipal, previa misa y duelo en el tanatorio. El alcalde del municipio malagueño ha convocado para hoy al mediodía una concentración en repulsa de este supuesto caso de violencia machista, informa Efe.
Si se confirmase que éste es un nuevo caso de violencia de género, Catalina Benítez sería la vigesimoséptima mujer en ser asesinada por su pareja o ex pareja en lo que va de año en España. Esta misma semana un hombre asesinó a su mujer, de 48 años, en Cartagena (Murcia), tras que ésta iniciase el proceso de divorcio. El hombre, de 66 años, le disparó dos veces, una en el vientre y otra en el hombro. Luego se suicidó pegándose un tiro en el mentón.
Hasta el 16 de junio de este año, 23 mujeres habían muerto a manos de su pareja o ex pareja según datos del Instituto de la Mujer. Desde entonces la cifra baila entre 26 y 31. El año pasado 75 mujeres fueron asesinadas por sus parejas, la cifra más alta desde que el Instituto de la Mujer registra los casos. En el caso de Andalucía, Catalina Benítez sería la séptima víctima de 2009, la primera en Málaga.
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